Por el Lic . Miguel A Fernández Méndez
Los habitantes
de la Parroquia de San Francisco Javier de Lezama,
Piden a los entes
gubernamentales, que no los despierten de ese sueño idílico que hoy los embarga,
pues han regresado a la época de la fundación del pueblo donde la vida bucólica se hace presente en la
paz, tranquilidad en definitiva, disfrutan de una vida sosegada. La razón de
tanta felicidad se debe:
1-
Las calles del pueblo se han convertido en
trochas, las madres están muy contentas ya que sus pequeños hijos pueden jugar
a gusto en lo que fueron calles, sin
temor a que un burro, caballo o
cualquier otro animal utilizado como medio de transporte los atropellen.
2-
El agua raramente llega por la tubería como lo
hacía en 1929 cuando fue inaugurado el primer acueducto. Ahora es una fiesta
colectiva y familiar el ir a los jagüeyes excavados a las orillas del río
Orituco donde se llenan los barriles con el preciado líquido, conduciéndolos a
los hogares sobre el lomo de burros.
3-
Dispondrán de más espacios para la construcción
de casitas de bahareque con techumbre de palma o escándulas , las viejas
casonas coloniales empezaron a ceder sus espacios por derrumbe de sus
estructuras. El lugar que ocupa la Casa Amarilla propiedad del Estado, volverá
a ser cementerio como lo fue en la colonia para enterrar negros e indios. La
Casa de Alto por indolencia de su propietario
se ha ido cayendo lentamente, será
recordada como patrimonio histórico de Lezama que antaño le fue otorgada esa distinción.
4-
Acudirán a las recetas de yerbateros y a los
ensalmos de brujos pues el ambulatorio no cuenta con medicinas. Esto lo
consideran muy bueno ya que no tienen
que molestar a los médicos quienes se ven en apuros para extender el récipe por la carencia de
medicinas en las farmacias a nivel local, regional, y nacional
5-
El carburo usado para madurar topochos y
cambures, reaparece en los hogares como fuente para obtener luz, esto lo
considerado muy beneficioso, las personas se acostarán más temprano, dormirán
mucho más, de esa manera recuperan
pronto la energía gastada en las labores diarias y también ahorran dinero al
no pagar
por el servicio eléctrico deficiente
6-
El aseo urbano dejó de prestar el servicio pero
la inteligencia del lezamense los ha
motivado a enterrar la basura de manera que en un futuro, se convierta en
fuente productora de gas y venga alguna
compañía para extraerlo sin que Lezama se
beneficie de ello por no necesitar nada de nada.
7-
Los teléfonos
pasaron a ser adornos en los hogares, el
timbre de estos aparatos no
seguirán interrumpiendo las labores cotidianas o el sueño de niños o adultos,
otra cosa que los beneficia es el aprendizaje del método comunicacional
mediante el sonido del tambor y las señales de humo. Ya los Kimbánganos abrieron
una escuela para enseñar a comunicarse con
el tambor
8-
Todos los habitantes del pueblo están muy
alegres, entrenándose en equitación para valerse del equino en viajes para
Altagracia u otros pueblos vecinos ya que las vías terrestres de comunicación para vehículos automotores están craterizadas
por impactos de meteoritos provenientes de las esferas interplanetarias de la
ineficiencia gubernamental
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